miércoles, 4 de junio de 2008

Fisión


Siempre que escribo selecciono música, que suelta mis dedos y los conecta con imágenes que tengo en la cabeza. Es el nexo de unión que hace posible lo que de otra manera no podría ocurrir. Pues en mi cerebro las ideas tienen vida, los personajes hablan, los paisajes, contextos y sentimientos son nítidos. Pero al transformarlos en palabras se me pierden. Creo que los dedos quedan lejos y ya bajando por los hombros las ideas son reflejos... la música les adormece y así, ralentizados, puedo observar sus sombras.

Escribimos para transmitir. Con una finalidad que es clara para el autor y no siempre para el lector. A veces incluso ciframos las palabras, encubrimos, derivamos y creamos una tercera generación de la idea primitiva. Pero al que escribe le da igual, pues al lanzar palabras consigue su objetivo.

Hoy escribo(te) sin música. No hay pensamiento, ni sentimiento que me mueva. Estoy helada.
Empezó por la tarde. Me sentía rara. Pensé al acostarme que todo pasaría, pero por la mañana al abrir los ojos lo noté. Frío. Un manto que me envolvía en la cama.
Ni el café ni el agua ardiendo han ayudado. Aun con 20 grados, manga larga y chaqueta, helada igualmente. Y según pasaba el día lo notaba más dentro, en los huesos.
Mi cuerpo no lo reconoce: no tengo fiebre, no tirito pero es un frío físico y sospecho lo causa.

Paseaban. Eso hacían: pasear y hablar. Parecía como si al andar y respirar el aire fresco, las palabras brotaran sin parar.
Dónde quedaran o cuándo daba igual. Preferían las afueras de la ciudad pero el centro también les valía.
A veces quedaban y andaban sin rumbo fijo. Sólo tenían unos minutos: una vuelta a la manzana, nada más. Cuando habían regresado tenían más que contarse y seguían caminando, por otras calles, sin pensar... sólo hablando.

Nadie pudiera sospechar que algo les uniera de tan diferentes que eran. Sin embargo tras varios pasos sus andares se acompasaban, su respiración se relajaba y surgía la armonía.



Ves? Todo depende de cómo se cuente. Cada persona, cada momento tiene su historia. Yo también observo y retengo.

Él la enseñó su ciudad: la de sus recuerdos. A través de calles, edificios y rincones fue desnudando su alma.

Y allí en la cueva, sobre río, tras la universidad... hombro con hombro, sin mirarse, lanzaron y bebieron secretos. El viento les ayudó.


Resulta curioso el poder de las palabras. Letras, sonidos agrupados, que transforman la realidad.
Una vez emitidas se rigen por las leyes de la física. Acción-reacción impredecible, dadas las variables de un sistema en movimiento.


Apoyada en la barandilla, buscó el valor, decidida a dejar que el aire entrara.Pero no calculó bien y la ventana que pretendía tornar se abrió con fuerza.
Horrorizada trató que él no escuchara. "No me hagas caso ... nos vamos ?"
Una mano fuerte sobre el brazo frenó en seco la huida. Y arrastrándola junto a él, con determinación, la hizo enmudecer con sus palabras.


No te importen las palabras. Todos las usamos: bien, mal o regular.Pero son mutables, maleables y si quieres se desvanecen.

Que te inquieten los silencios, los misteriosos. Los que al compartirlos se disfrutan, unen más. Y al no hacerlo, si se alimentan, llevan a la fisión.
Que te inquieten, o te calmen...


14 comentarios:

Vigilante dijo...

Tus palabras a veces consiguen evocar en mi mente recuerdos de situaciones pasadas y algunas presentes, es como si tus palabras estuviesen en armonía con mi vida.

Sera que yo asimilo tus palabras y las mezclo con mis recuerdos y preocupaciones, de todos modos he esperado demasiado tiempo que me contaras cosas sobre el pasado.

Ginebra dijo...

más que doble pirueta, Tequila, ésto es un TRIPLE SALTO MORTAL!!!!!. Tus palabras siempre son bienvenidas para mí.
Besos.

Belén dijo...

Pues yo cuando te leo, quito la música, y no pongo fotos, tus palabras me son suficientes...

Besicos

Gabriela dijo...

Palabras en buenas manos, es cierto, a cada cual le sugiere algo.
Tu tienes esa brillante habilidad.

Un beso.

interpreta-sones dijo...

narradora narrada. mágica fisión, hoy sin fusas, pero siempre con musas. fisión confusa. GREAT!

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Devuelvo tu amable visita a La Acequia, en la que espero verte en próximas ocasiones. Veo en tu blog amor por la música y las palabras. En esta entrada me gusta como gradúas los textos y los fusionas. Y el final, tenso y abierto.
Saludos.

Argeseth dijo...

Es una tentación hacer este tipo de cosas, pero no creo que me saliera.
He tenído que releerlo, de a poquito, me gusta la idea de pasear y hablar.

BeSos.

Hyku dijo...

...de ahí que uno adore las palabras, pero suela fiarse más de los hechos...

Besos gramaticalmente impecables :-)

Anónimo dijo...

No hay música dices...pero sí hablas de armonía, eso es música, eso es la esencia de la música, la que se siente, no necesitas escucharla, tus letras transmiten sensaciones, hmmm tristes, ¿angustia?, si eso....

Silvia_D dijo...

La tentación, la necesidad de expresar es demasiado grande, jugar con las palabras es el escudo que nos protege y evita el estreptease integral...
Besos, amore, de una que escribe(te) o piensa...

Buen fin de semana, nena^^

Anónimo dijo...

copio y pego:
"con una finalidad que es clara para el autor y no siempre para el lector. A veces incluso ciframos las palabras, encubrimos, derivamos y creamos una tercera generación de la idea primitiva"

así es, palabras con doble filo para desenvainar y el que quiera que se quede pensando, porque una historia casi siempre son dos.
salud-saludos

Anónimo dijo...

Pues para estar helada, vaya pedazo de volcán has puesto en erupción ;)

Besos y no duermas con el culo al aire, que de hay vienen los resfriados XD

Silvia_D dijo...

Espero que hayas tenido un buen finde , nena.
Besos , cariño^^

calimatias dijo...

Hola, celebro que le gusten las peculiaridades de un hombre lo suficientemente loco como para no ser capaz de organizar su vida. De Aníbal ni le hablo.
Me pongo a leer sus cosas al azar. Sin prisas. Disfruto horrores con el vídeo de Enero en la playa. Comparto, no todo afortunadamente, su reflexión sobre el amor grande. Yo también soy propenso a divagaciones y, por lo tanto, vulnerable más que otros que no se hieren tanto a sí mismos.
La historia del libro de su hermano es excelente. Consigue lo que quiere, dejar al personal rabiando por conocer el título.
Sus rarezas, imagino, serán muchas más. Parecen sólo un anticipo. Me gusta hara-kiri. Acierta con el tono y el lenguaje. Por cierto, creo haberle leído en algún post que se siente lectora, que no escribe bien. Supongo que es retórica autojustificativa y modesta. Me he divertido mucho con sus afanes deportivos que comparto. Y le recomiendo la novela de Nick Hornby. "Alta felicidad".Ya tiene años, como la película, pero el autor es fanático del Ársenal y de la música. Lo podrá comprobar fácilmente.
Por último,los 5 destrozadores de mi corazón me demuestra que sabe narrar y escribir con frescura, sin miedos, además de que cumple la función básica de interesar al lector. Me quedo con ganas de más.
Ánimo. No desfallezca. Cuéntenos cosas como hasta ahora.